cerrandole el paso al dolor.

-Y ahora es cuando todo lo veo claro, lo veo todo sin mas difuminados en mi vida, sabiendo lo que quiero y sobre todo lo que soy. Antes podía ser estúpida, inútil y poco coherente en todos los sentidos una niña sin experiencia, pero poco a poco, luchando contra la corriente de la vida mala, te das cuenta de que debes cambiar, de que todo viene y todo se va, a pesar de que duren unas milésimas de segundo en esta dimensión, te machacan con lo mismo, te toman como una completa idiota y te juegan malas pasadas. Pero no se si por gracia o por desgracia cada día me noto mas fuerte, me noto con la vitalidad de un explosivo para arrasar con todo lo que venga y más. No niego que no lo pase mal, ni que tampoco llore como una niña desconsolada, pero si tengo que admitir que si lloro no es por una simple gilipollez, ni por un juego de pito pito gorgorito que perdí, ahora es cuando lloro cuando en verdad las grietas de mi corazón se van haciendo mas profundas y cuando en el juego del amor hacen trampas sin saber lo que es el dolor y sin tener ninguna consideración hacía el otro. Poco a poco me doy cuenta que sé afrontar distintas confrontaciones de la vida y muchas desdichas que se anteponen en tu camino, por eso cada vez me me estoy dando cuenta y estoy segurísima que por esos pequeños detalles que vienen y van son cosas del destino que se tiene que aprender ha afrontar.